Dos almacenes clandestinos de motorepuestos fueron desarticulados en San Miguel de Tucumán. Las piezas estaban destinadas al mercado “negro” local y fueron incautadas durante distintos procedimientos policiales. Un hombre, de 37 años, fue aprehendido por orden de la Justicia.
La Policía concretó allanamientos en casas particulares entre el jueves y ayer. En dos de las viviendas, los efectivos encontraron rodados completos y piezas. Entre estas últimas, motores, tanques y ruedas. En otros lugares, secuestraron armas de fuego (una nueve milímetros y una tumbera) y celulares, entre otros elementos.
Los pesquisas creen que una de las viviendas había sido utilizada como un desarmadero de pequeñas proporciones, a la vez que como un lugar de comercialización irregular.
Uno de los procedimientos se llevó a cabo en pasaje Formosa al 1.200. En el fondo de la casa, los policías encontraron alrededor de seis moto completos, y varios cuadros de rodados. También hallaron cuatro caños de escape; cinco asientos; 13 tapas de motor; 10 cilindros; siete llantas; 20 cachas, un carburador; cinco amortiguadores; y tres barrales. Los ocupantes de la vivienda no pudieron certificar la procedencia de los elementos mecánicos.
Otro operativo se concretó en la zona de diagonal Anselmo Rojo y avenida Brígido Terán. Allí, frente al baño, se encontró un motor marca Honda con pedido de secuestro. El ocupante afirmó en ese momento que había adquirido este accesorio de forma ilegal, como así también otras motopartes que estaban en el baúl de su vehículo.
Las medidas habían sido autorizadas por el juez Juan Francisco Pisa, tras el requerimiento del fiscal Diego López Ávila.